El parón veraniego, por mucho que Senior Manager o Andrés "Marca Propia" Pérez luchen contra él, existe. Y no sólo en los trabajos, cuyo exponente está en el síndrome postvacacional que hemos sufrido muchos en nuestras propias carnes, sino también en el ocio y las relaciones personales.
En mi caso he notado un recrudecimiento de la actividad en todo tipo de redes sociales, los amigos en facebook crecen por días, los enlaces de Xing, Plaxo y Linked in también están de lo más "promíscuo", los blogs personales retoman la cadencia de entradas acostumbrada, etc.
Iluso de mí, pensé que el bajón veraniego, al menos en el caso de facebook, se trataba del ocaso de una moda. Nada más lejos de la realidad, la segunda quincena de septiembre ha llegado con nuevas conexiones y mucha mayor actividad por parte de viejos contactos y los nuevos: actualizaciones de estado, fotos, comentarios, mensajes, etc.
Al fin parece que FB madura en España y pasa a ser un estándar de la sociedad y no sólo un exclusivo parterre del mundo geek. Algo que otros países tienen ya asumido con esta red social u otras. Si os fijais empieza a ser motivo de conversación en el mundo real, ayer sin más con mi hermana estuve revisando varios momentos "facebook" y por la noche volvió a sucederme con amigos.
Las redes enfocadas al mundo laboral son un caso un poco más complejo pero con los mismos síntomas, parón veraniego y renacer otoñal. La complejidad aquí viene dada porque la crisis está suponiendo que viejos amigos cuiden currículums y redes de contactos ante los fantasmas de despidos, ERE´s y reorganizaciones empresariales.
Y vosotros, ¿habeis notado este cambio tras el verano?
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2 comentarios:
Yo sí he notado el crecimiento de Facebook. Pero a mi, personalmente, no me parece una ventaja. Al principio me divertía porque era un medio más para estar en contacto con mis amigos más íntimos. Cuando empecé a recuperar viejas amistades del baloncesto, colegio, facultad, también me parecía un medio perfecto para relacionarme con viejos conocidos y recuperar contactos.
Pero ahora que ha crecido tanto, me he visto "obligada" a agregar personas de mi entorno laboral, y ya no me gusta nada. Esto es un Gran Hermano, todo el mundo sabe qué has hecho el fin de semana, dónde veraneas, quiénes son tus amigos, o cómo es tu casa, familia, etc.
Entre amigos no le veo mayor problema a esa falta de intimidad, pero con la llegada de compañeros de trabajo más o menos cercanos, en dos ocasiones me he visto obligada a pedirle a un par de amigas que retiraran alguna foto en la que me habían etiquetado. Fotos que me había hecho en un ambiente distendido y personal, pero que en absoluto quiero compartir con otro entorno que no sea ese.
Ya se que hay opciones de privacidad para limitar hasta donde pueden ver los contactos, pero ya me supone una molestia más, ir uno por uno cerrando las ventanas a las que en algún momento han podido asomarse...
Tatiana Cuesta
Si Jaime, yo también lo he notado... Las redes sociales a las que pertenezco y las herramientas de Networking que utilizo están más dinámicas que hace unos meses...
Lo que me preocupa (y he tomado medidas al respesto) es el incremento de publicidad, spam y gente indeseada en estos círculos en donde algunos piensan sacar ventaja comercial. He cambiado algunas funciones de Facebook para evitar a los indeseables y estoy evitando relacionarme con gente que no conozco y cuyas intenciones de amistad aparentan ser sospechosas... Creo que la margen de la utilidad de estas redes, tambiém están los peligros que encierran.
SM
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